A veces, ciertas circunstancias pueden pasar desapercibidas para la mayoría de las personas. De tal modo, que sin querer pongamos el foco en donde no corresponde.
Estas palabras pueden parecer un poco enigmáticas, pero después de escribir una entrada a esta bitácora como fue la de ayer, haciéndonos eco de la preocupación de las AMPAS en la Región de Murcia con respecto al comienzo de curso y después de haber hablado con una persona que ha sido un padre implicado en cuestiones de AMPAS y que ahora ejerce de concejal de Cs, te das cuenta de que aquí todos los responsables de educación, “miran para otro lado”. ¡Si!, se van pasando “la pelota”, los unos a los otros, y al final todo recae sobre los mismos… “Los Centros Educativos”.
Por lo tanto, es totalmente aceptable, la preocupación de los padres y madres, y más cuando se tiene la sensación de que se está entrando en una segunda ola de la pandemia.
Y ante todo esto, me viene a la memoria las declaraciones del pasado 30 de julio nuestra ministra de Educación en la SER, que por cierto, lo dijo muy claro… “Los colegios abrirán en septiembre”.
Pero si por un casual no nos quedara claro, lo vuelve a decir… “Las escuelas han de permanecer abiertas”. “Es un objetivo irrenunciable”. ¡Está claro!, los centros educativos abrirán sus puertas en la fecha designada sin ningún género de duda.
Siendo sincero, puedo entender la posición de la ministra y que quiera dar un punto de normalidad a la cuestión. Por otro lado, no es menos cierto que las clases presenciales en la escuela son un pilar importante en educación. Sobre todo, en la relación profesor alumno en las etapas de infantil y primaria. O incluso en la Formación Profesional que exige una relación más cercana entre los profesores y alumnos, pues sus clases son más prácticas y más ajustadas al mundo laboral.
No obstante, hay que ser realistas. Estamos ante un problema de gran calado y difícil solución, al menos como se pretende por parte del ministerio y de las distintas consejerías de Educación.
Son muchos los interrogantes que surgen, por ejemplo… ¿Cómo mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros en aulas, que no están preparadas para cumplir esta norma? Aulas que de por sí ya están llenas con 25 o quizás más alumnos. ¿Cómo lo van a hacer?, ¿van a tirar paredes como decía mi amigo Pedro Llera? Si mal no recuerdo las ratios en la Región son 25 alumnos por aula en infantil y primaria, 30 en secundaria y 35 en bachillerato.
De todos modos, no deja de ser llamativo que las autoridades sanitarias propongan no más de quince personas en reuniones y los alumnos entren a las aulas en estas condiciones. En algún momento nos hemos perdido.
Tema mascarillas… ¿aguantarán los críos toda la mañana con la misma puesta?, ¿cómo convencerlos para que ni se arrimen entre ellos? La verdad, no lo veo.
Desde luego, la propuesta de los padres de hacer uso de instalaciones públicas, personalmente me parece muy aceptada y que alguien debería de sopesar y valorar adecuadamente.
No quiero cansar a cuantos visiten esta bitácora, pero el documento enviado a la Consejería de Educación da para mucho, pero desde mi humilde posición, yo les propondría a las AMPAS firmantes, que fueran valientes e hicieran llegar este documento al ministerio, para que sean un poco más consciente de la realidad.
¡Es mi opinión!
0 comentarios